lunes, 31 de julio de 2017

TALENTO

Para este artículo definiré talento como “la aptitud o el potencial que uno tiene para desarrollar cierta habilidad”. Por lo mismo es posible observar en disciplinas como el parkour gente con un gran potencial inicial, que han sabido desarrollar en el tiempo resultados increíbles. Pero, la palabra talento no significa que alguien sea capaz de ir más allá de sus facultades iniciales. En muchos casos habrás visto gente teniendo más facilidades incorporando y desarrollando habilidades, pero que a la larga se retiran. ¿Qué es lo que hace que una persona se mantenga? Seguramente encontraremos respuestas como la motivación, la perserverancia, el tiempo, el compromiso y en parte un conjunto de sentido personal que incorpora cada individuo al arte del desplazamiento. 

Pero mi pregunta no va a que entendamos la razón de las motivaciones, sino que si observas bien es muy poco probable que en estas respuestas encuentres “el talento”, ¿Por qué?  Porque el talento en una disciplina es puesto a prueba en cada momento, haciendo que incluso el más talentoso perciba un camino largo por recorrer, una carencia de este mismo. En otras palabras, aferrarse del talento que posees en algo, será posible hasta que te pongas en “jaque” a ti mismo.

Desde una perspectiva cronológica podríamos atribuirle al talento un tiempo “presente-pasado”, porque es sólo cuando ponemos a prueba nuestro potencial que entendemos el real valor de este, pero una vez siendo conscientes nos encontramos desarrollándolo, generando mejores facultades, subiendo otro escalón diferente al de partida.


Entonces cuando el parkour es una disciplina, un camino, una herramienta, el talento es sólo el punto de partida.



Escrito por: Sofía P.

lunes, 22 de junio de 2015

Parkour y Los Mutantes

En muchos lugares y de muchas formas hemos escuchado frases configuradas y repetitivas que asociamos al parkour. Frases que nos han ayudado a entender sobre lo que practicamos pero que parece al frente de un abismo de dudas y de otras interpretaciones.

La ventaja de esto ha sido que en la manera que aumenta la difusión, estos conceptos han sido una ayuda a explicar la materia en cuestión, pero a su vez (dependiendo del contexto) podemos verlas como conceptos muy relacionados o palabras incluso "ofensivas" según lo que entendemos de estas. Palabras y acciones que según el grupo donde estamos o por simplemente ser quienes somos representan cosas "buenas" o "malas".


Parkour, Disciplina, Deporte, Entrenamiento, Freerunning, Estética, Lesiones, Libertad, Arte, Ser y Durar, Trazo, Mortales, Traceur, Cuidado, Entorno, entre otras palabras son un conjunto de conceptos relacionados a los que rápidamente se le han asignado adjetivos: bueno, malo, coherente, eficiente, inconsecuente, débil, etc. ¿Quién fue el que nos enseñó esto? ¿Lo aprendimos de la experiencia personal o de la experiencia colectiva? Y si fue de los demás ¿Cuáles son los grupos de palabras que he podido abarcar dentro de mi rango de tolerancia?

La verdad es que básicamente estamos adaptando nuestras formas y en la historia de cualquier situación humana siempre han existido bandos. Negar un bando muchas veces significaba ser del otro, y apostar por uno significaba ciertos deberes y derechos. Es más, una conclusión personal podría ser vista como una decisión hacía un grupo, y en la medida que más personas participen con conclusiones similares será más fácil apostar por un objetivo en común. En gran medida, somos el resultado de nuestras experiencias, desde donde nacimos hasta las circunstancias que nos hicieron crecer (y la que hemos aprendido de otros) resumen la información consciente que hemos recibido.



Si el fuego me quemó los dedos, la conclusión se resume "evitar contacto con este", "fuego malo". Pero a su vez este ha aporta calor y la belleza de una fogata nocturna impresiona. Entonces ahora el fuego es " útil, bello y peligroso". Este resumen en que las cosas son un conjunto de adjetivos es fácil de hacer, rápida, y sobretodo más sencilla de transmitir que la idea completa. No siempre existe el tiempo o la dedicación para la "idea completa".

A si mismo cuando hablamos de parkour su gama de adjetivos y formas es tan amplia como personas han podido experimentar u observar esto. Para algunos el parkour es mortales, para otros expresión, compartir, alegría, felicidad, eficiencia, adaptabilidad, etc. Pero como puedes observar, sigue alimentándose de conceptos que catalogamos en nuestra propia linea de información como "buenos", "malos", etc. Nos ofendemos con tanta facilidad que aquí mi siguiente pregunta ¿Podemos ser más que nuestras conclusiones o las que hemos aprendido de otros? 


¿El parkour es bueno o malo? ¿por qué?. Seguramente la respuesta que escuches será una conclusión en base a la experiencia de la persona que te está hablando, su patrón de adjetivos, sus experiencias y ¿porqué no decirlo? sus limitaciones. Llegamos a casa con la información ya masticada. El sentido profundo se quedó con la persona que trato de revelar sus "porqués" y hacer visible lo invisible. Luego, el receptor de dicha información llega a casa con una frase "el parkour es...", frase que trascenderá a su primer emisor pero que en la medida que aumenten los oídos que la escuchan, más expuesta estará a su propia mutación. ¿La mutación es buena o mala? Bueno, eso depende de nosotros... LOS MUTANTES.




LOS MUTANTES

Nos llamo mutantes porque somos el resultado de nuestra generaciones pasadas, de nuestra propia generación y de nuestra propia capacidad de mutar la información que nos brinda la vida, la gente y nuestro propio ego. Hemos sido los responsables de las mutaciones que expresaremos en los que empiezan, y ellos luego seguirán con este proceso de forma inconsciente y espontanea.


"El parkour es..." y en los puntos suspensivos inserte el conjunto de palabras que considere correcto. No podemos usar palabras que no conocemos o que nos generan sensaciones contrarias al concepto que queremos definir. Pero si el punto de partida es una conclusión ya hecha ¿Cómo es posible la mutación? Bueno, no cambiamos la realidad de formas irreales e imposibles para nuestra mente, sino de las formas más reales y fundamentadas para nuestro Ego. Entonces podemos decir que nuestro EGO es una fuente de mutación, es el filtro de la información y la herramienta para generar nuevas conclusiones.

También nos quise llamar mutantes porque ¿No deberíamos ser nosotros los que están en constante cambio? ¿Cambio que conlleva a la adaptación? Sin la base o solidez de algo, nuestra consistencia (o fuerza interna) podría verse socavada.


Entonces ¿Qué es más peligroso? ¿La constante mutación o la rigidez? Y parece que muchos han optado por la rigidez. Una forma dura como ladrillo de enfrentar los obstáculos, los conceptos, la vida y a uno mismo.

Por ejemplo: es más fácil concluir "debo vencer el miedo" como una roca sólida que comenzar a preguntarnos ¿Qué es el miedo? ¿Qué es vencer? ¿En algún momento se irá? ¿Que no se vaya significa  la derrota a mi miedo? ¿Puedo ser amigo de mi miedo?. La rigidez nos da entonces una base, un interior descansado en la forma de nuestras conclusiones (o las de los demás).

Pero por otro lado la rigidez hace que el aprendizaje sea de una sola línea, ir más allá de nuestra propia directriz parece una idiotez y por tanto "hacer lo que me incomoda" y "superarme a mi mismo" tiene mayores limitantes, los que limitaran nuestra "capacidad de adaptación".

Entonces se puede decir que nuestras conclusiones y nuestra mutabilidad deben ser un conjunto armónico entre el caos y el equilibrio. ¿Somos mutantes de la filosofía o sólo grabadoras que repiten? o ¿Somos intermediarios?. Ser en extremo uno es prácticamente ir en contra de las mismas formas de la filosofía del parkour.



¿Por qué?

Por un lado tenemos a los "primeros": primeros fundadores, practicantes, objetivos y primeras formas. La mutación absoluta es llegar a una linea completamente diferente y perder el punto de "inicio", es perder a estos "primeros" de vista y por consiguiente podría ser una cosa prácticamente diferente. ¿Esto es bueno o malo? Juzgue usted.

Por otro lado la rigidez significaría mantener la linea de las primeras formas y con esto los primeros objetivos, uno de los cuales tiene por finalidad que tu logres "adaptarte". En ambos existen incoherencias, pero como el ser humano está lleno de estos puntos de choque, no podemos decir que es raro ver estos espacios en donde lo absoluto es complicado.


Estar bien con nosotros es parte de lidiar con nuestra mutación propia y aceptarla, como si fuese una planta. Darle rienda suelta al cambio hará que cubra todo y que comience a destruir cierta solidez en nosotros mismos hasta que sólo quede la planta y las ruinas de lo fuimos A su vez, negarla es como esconderla en un sótano donde si tiene la suerte de crecer, estará afectada más de nuestras oscuridades que de lo bueno que podemos darle. Asociaremos cada aspecto de cambio a algo negativo y será eliminado de nuestras formas. La planta debe crecer bien, pero también el resto de nosotros.




CONCLUSIÓN


Sobre este aspecto he querido citar una frase que nos demuestra porque somos mutantes: "El parkour se instala entonces no sólo desde sus características propias en tanto disciplina corporal, sino también dentro de una disciplina donde la percepción del propio cuerpo y de la zona circundante se encuentran constantemente en una reflexión critica y reconfiguración del ejecutante y del espacio". Esa reconfiguración es la forma más simple que tenemos acceso al cambio, y es en donde descansarán nuestros aprendizajes, nuestros trazos, nuestras preguntas y nuestras formas. Esperemos tener la suficiente capacidad de reflexión para llevar mejor nuestro andar.



Y este fue el artículo de la semana, espero les haya gustado. Lo habría escrito hace mucho tiempo pero como es un tema bastante complicado, atemorizaba publicarlo. Pero como es bello, vale el riesgo. Nos vemos, gracias por leer y el apoyo. Ya vamos en las 1.900 visitas.

Lo terrible, es que de donde saque la cita ya no se encuentra disponible. Pero como era increíble texto, esmeraré en encontrarlo. Este es el antiguo link: Arte del Movimiento e Interculturalidad de María Sol Verniers.